Hace dos domingos, la Iglesia GracePointe, dirigida por el pastor Josh Scott, despertó la ira en algunos de sus seguidores en línea, la razón, fueron las palabras del mismo pastor que decían:
“La Biblia”, dijo la iglesia, “no es: la Palabra de Dios, que se interpreta a sí misma, un libro de ciencia, un libro de respuestas / reglas, inerrante o infalible”. Más bien, es: “un producto de la comunidad, una biblioteca de textos, multi-vocal, una respuesta humana a Dios, viva y dinámica”.
Hasta el miércoles por la noche, la publicación había atraído más de 1.200 reacciones emoji junto con 1.800 comentarios. De los 1200 emojis, más de la mitad eran caras enojadas, poco más de 300 eran emojis riendo mientras que más de 100 eran caras tristes. Solo 157 reacciones aprobaron la publicación.
El cristianismo progresista se caracteriza por la voluntad de cuestionar la tradición, la aceptación de la diversidad humana, Cristianismo progresista.
¿Qué fue lo que generó esta reacción en las personas? Tratare de ser breve en mi explicación:
En el año 2006 un movimiento llamado: Cristianismo Progresista. empezó a crecer y trascender fronteras, este movimiento fué parte de una tendencia más grande llamada “la iglesia emergente”, probablemente usted ha usado muchas veces esta palabra, asociandola con la idea de una iglesia que sale adelante, que se proyecta, pero déjenme contarles que no es así, en realidad se trata de un cambio en la manera como se presenta el evangelio de Cristo, y aquí les voy a contar cuál es la ideología de este movimiento que es un peligro para el verdadero evangelio de Cristo.
En el corazón de estos movimientos estaba el deseo de articular una forma de ser cristiano que fuera una alternativa a la fe cristiana tradicional, los líderes del cristianismo progresista se habían cansado de definir su fe cristiana en términos negativos.
Les dejare algunas señales para identificar el evangelio progresista:
Una de las diferencias más grandes entre el cristianismo progresivo y el cristianismo histórico es su perspectiva de la Biblia, históricamente los cristianos han visto la Biblia como la Palabra de Dios y la autoridad para sus vidas. El cristianismo progresivo normalmente abandona estos conceptos, enfatizando la creencia personal por encima de los mandatos bíblicos.
En iglesias progresivas, valoran las experiencias, los sentimientos y las opiniones personales por encima de la verdad objetiva. Cuando la Biblia deja de ser vista como la Palabra definitiva de Dios, lo que una persona siente que es verdad llega a ser la autoridad suprema para la fe y la práctica, comentarios como:
-“No somos fundamentalistas .
-No creemos que la Biblia sea la palabra infalible de Dios.
-No creemos que Dios odie a los gays.
-No negamos el derecho de las mujeres a elegir lo que les sucede a sus cuerpos ”
Para el evangelio progresista, la sabiduría de San Francisco de Asís : “predicar el evangelio siempre, y cuando sea necesario usar palabras ” resuena profundamente. “Creemos que la fe cristiana es un viaje, no un destino. Pensamos en nosotros mismos como cristianos en “obra en progreso”
Existen algunos cristianos progresistas que dicen creer en doctrinas como la inspiración, inerrancia y autoridad de la Biblia, pero tienen que hacer acrobacias lingüísticas para que esas palabras signifiquen lo que ellos quieren que signifique, por ejemplo, a la pregunta ¿Es la Bìblia inspiración Divina? según el evangelio progresista la respuesta es: “La Biblia es inspirada de la misma forma y al mismo nivel que muchos otros libros, sermones y cantos cristianos.
iglesia diferente que se instaló en el condado de Williamson hace más de ocho años.
El cristianismo progresista representa un enfoque teológico posmoderno y no es necesariamente sinónimo de política progresista. Se desarrolló a partir del cristianismo liberal de la era moderna , que tenía sus raíces en el pensamiento de la Ilustración . Como tal, el cristianismo progresista es un ” movimiento posliberal dentro del cristianismo ” que busca reformar la fe a través de las ideas del posmodernismo y una reivindicación de la verdad más allá de la historicidad verificable y la factualidad de los pasajes de la Biblia al afirmar la verdades dentro de las historias que pueden no haber sucedido realmente.
Son muchos los cambios trascendentales que ha hecho este “nuevo evangelio” sin lugar a dudas no procede del cielo, por eso la invitación a usted, es que pueda analizar siempre cada uno de los sermones que abundan en línea y analice a la luz de las escrituras cada palabra que escucha.
Por: Alba Osorio